¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una reacción automática o un mecanismo adaptativo natural que nos prepara para enfrentarnos a una amenaza o peligro, de manera que es una respuesta natural defensiva de todas las personas. Sin embargo, también existe la ansiedad patológica, que es cuando la ansiedad actúa en forma alterada y termina incapacitándonos.
Por lo tanto, cuando el sistema de reacción a la ansiedad funciona incorrectamente, ya estamos hablando de un problema de salud que produce un deterioro general de la persona. Dentro de las variedades de esta enfermedad, el trastorno de ansiedad generalizada es uno de los más comunes en la población.
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¿Cuáles son las causas de la ansiedad?
Entre las causas del trastorno de ansiedad pueden encontrarse:
- Aspectos genéticos
- Aspectos circunstanciales, como un evento traumático
- Alguna experiencia vital significativa, como sufrir despido del trabajo o terminar una relación
- El consumo de alcohol y/o drogas como anfetaminas, éxtasis o LSD
- También podemos identificar factores que alteran esta respuesta defensiva natural, los cuales se dividen en:
- Factores predisposicionales: agrupa factores biológicos, de personalidad y ambientales
- Factores activadores o desencadenantes: Cuando la persona vive situaciones que sobrepasan nuestra reacción natural, o algún acontecimiento vital con consecuencias graves, o cuando se enfrentan obstáculos para conseguir un logro, o cuando hay consumo de estimulantes o drogas.
- Factores de mantenimiento: Cuando los problemas que originan la ansiedad no se logran superar de forma adecuada o se incrementan al punto de transformarse en un trastorno.
¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?
Los síntomas de la ansiedad pueden ser físicos y psicológicos y van desde una excesiva preocupación que se mantiene en el tiempo hasta un aumento en la frecuencia cardiaca, síntomas que van incrementándose y agravándose de no ser atendidos por un profesional, de ahí la importancia de consultar a tiempo. Podemos clasificar los síntomas en:
- Físicos: Taquicardia, sudoración excesiva, temblores, náuseas, tensión muscular, cansancio, molestias digestivas, irritabilidad, insomnio, entre otros.
- Psicológicos: Permanente sensación de amenaza, miedo e inseguridad, temor a perder el control, incapacidad de tomar decisiones, incertidumbre frente a todo, entre otros.
- De conducta: Impulsividad, sentir que se está en estado de permanente vigilancia, dificultades para estar quietos, cambios en el lenguaje corporal, entre otros.
- Intelectuales o cognitivos: Dificultades para concentrarse, expectativas negativas, pensamientos distorsionados, problemas de memoria y de atención, entre otros.
- Sociales: Problemas comunicacionales como verborrea o dificultades para seguir una conversación o responder preguntas cotidianas, entre otros.
¿Cuáles son los tipos de ansiedad?
Existen diversos tipos de ansiedad, los cuales se clasifican según las características de la patología que la persona presente. Sin embargo, los siete más comunes son: Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), Trastorno por Estrés Post Traumático (TEPT), trastorno de pánico, Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAD), fobia social, agorafobia y fobia específica.
- Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC): Es la aparición de un pensamiento recurrente y con ello una conducta que no se puede evitar de hacer..
- Trastorno por Estrés Post Traumático (TEPT): Se produce después de que la persona ha sufrido un evento traumático en el que ha sentido que su vida corría un riesgo, por ejemplo, ser víctima de un delito o haber sufrido un accidente importante.
- Trastorno de pánico: Es cuando la persona sufre ataques de un miedo intenso, sin que exista un estímulo que lo gatille. Esto provoca falta de aire y la sensación de que se morirá en este momento.
- Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAD): Es uno de los tipos más comunes y es cuando la persona se siente preocupada o alterada la mayor parte del tiempo.
- Fobia social: La persona enfrenta un miedo irracional a toda interacción social, lo que no les permite ser capaces de enfrentar este temor y terminan asilándose.
- Agorafobia: Es cuando la persona presenta un miedo desmedido a los espacios abiertos o lugares públicos, por lo que prefieren mantenerse en su casa, oficina, entre otros.
- Fobia específica: Es un miedo irracional a algo determinado. Puede ser a algo tan común como fobia a las arañas, hasta unas más extrañas como fobia a la lluvia.
¿Cuáles son las consecuencias de ansiedad?
Las consecuencias de la ansiedad pueden ser variadas. Por ejemplo, la afectación de nuestra vida social, laboral y familiar. A su vez, puede haber consecuencias físicas, como debilitamiento del sistema inmune, pérdida de memoria a corto plazo, problemas digestivos, insomnio, depresión, malestares físicos en general e incluso ataques al corazón.
La persona también puede presentar disfunciones sexuales y un envejecimiento prematuro, pues se produce una aceleración del deterioro celular.
En general, la ansiedad -entendida como una enfermedad- obstaculiza el funcionamiento normal de la vida de la persona, generando que la persona enfrente grandes dificultades para realizar labores que antes eran cotidianas.
¿Cómo controlar la ansiedad?
Los tratamientos psicológicos para controlar la ansiedad ayudan a comprender lo que sucede y a enfrentarlo de manera eficaz.
Dependiendo del tipo de ansiedad que presenta cada paciente, se plantea un tratamiento específico. En vez de la terapia cognitiva conductual, el psicólogo puede proponer una Terapia Interpersonal, que ayuda al paciente a entender sus puntos más vulnerables en las relaciones sociales y contrarrestar aquello que le produce ansiedad.
Otros psicólogos combinarán la Terapia Conductual con técnicas de Mindfulness (meditación y autoconocimiento) y también está la opción de la Psicología Positiva (hacer énfasis en los que nos genera bienestar). En algunos casos se tiene que buscar ayuda farmacológica recetada por un psiquiatra y siempre es recomendable incluir actividad física como caminar o practicar algún deporte.
¿Quién trata la ansiedad?
Al tratarse de un trastorno que puede afectar gravemente la vida cotidiana de una persona, la ansiedad siempre debe ser tratada por un profesional de la salud mental, que puede ser un psicólogo o un psiquiatra, o incluso ambos en paralelo, cuando se trate de un caso de gran complejidad.
En Psicologosonline.cl podrás encontrar una gran variedad de psicólogos profesionales que podrán ayudarte a superar este trastorno.
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