Fobias

¿Qué son las fobias? ¿Cómo se tratan? En este artículo revisaremos algunas nociones generales acerca de las fobias que te pueden servir de ayuda.

8 OCT 2020 · Lectura: min.
Fobias

¿Qué son las fobias?

Las fobias son un tipo de trastorno de ansiedad que se caracteriza por miedos intensos a situaciones, lugares o cosas, que no plantean un peligro real. La persona que padece una fobia responde evitando el estímulo temido, y aunque sea consciente de que su miedo es irracional o desproporcionado, no puede cambiar su reacción emocional.

¿Qué tipos de fobias existen?

En el manual diagnóstico DSM-V se señalan las fobias específicas, que surgen en relación con ciertos estímulos, por ejemplo, sangre, algún animal, o situaciones específicas; y la agorafobia, que se caracteriza por miedo y evitación de lugares o situaciones diversas donde la persona siente que no podría recibir ayuda en caso de sentirse angustiada, con vergüenza o con otros síntomas incapacitantes.

Existen otros trastornos de ansiedad que son similares a las fobias, como por ejemplo, el trastorno de ansiedad social; o incluso trastornos de ansiedad relacionados con patologías médicas. Por este motivo, es importante que un especialista te oriente, y que evites auto-diagnosticarte.

¿Es posible "curarse" de una fobia?

Un dato interesante, es que aproximadamente un tercio de las fobias remiten solas, y el resto evoluciona en diferentes grados de cronicidad e intensidad. Dentro de las estrategias de tratamiento de psicoterapia se puede utilizar una combinación que incluya técnicas de relajación, exposición progresiva al estímulo temido, y exploración de las vivencias emocionales conflictivas.

¿Es necesario consultar con un psicólogo/a en caso de una fobia?

Si bien es posible vivir con la ansiedad e incomodidad propias de las fobias, en general, las personas que se interesan activamente por su salud mental, y buscan la orientación y ayuda de un especialista en psicología clínica, pueden disminuir los síntomas y con ello mejorar su calidad de vida, y adicionalmente, conocerse mejor a sí mismos/as, explorar y reconocer sus necesidades, mejorar su capacidad para relajarse, y fortalecer su equilibrio emocional, entre otros beneficios psicológicos posibles.

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Escrito por

José Ignacio Salazar

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