Relación en el trabajo
Hace un par de años me involucré con un compañero de trabajo casado. Llevaba un par de meses de llegar al trabajo y yo le ayudé mucho, fue muy amable y atento conmigo. Estamos en la misma sección del trabajo. Yo vivo sola con mi hijo y llevo muchos años en la empresa y de manera sólida.
Afectivamente no me ha ido bien y he privilegiado siempre mi relación con mi hijo, su bienestar y cuidar mi trabajo. El hecho es que me involucré con mi compañero, al principio él muy interesado y atento, empezó a criticar mi forma de vestir, peinarme, mi calzado, a dominarme. Y me fui volviendo insegura y y con temor a qué decir para que no se enfadara.
Así las cosas se fueron enfriando por parte de él al punto de que dejó de hablarme, me prohibió acercarme a él o escribirle. Pienso que se fue mostrando como realmente es y yo estaba ciega. Bueno, así pasó el tiempo y quedé aislada, me sentí muy mal sin saber ni siquiera cómo comportarme en el día a día. Él ascendió y llegó a asumir la dirección del departamento en que trabajamos, es una persona muy ambiciosa, y también pedante, ahora lo veo así, y dentro del departamento la gente no está contenta con su gestión.
Bueno, como sigo dentro del mismo departamento y quedé aislada, me siento mal. Como es el día a día de verlo y escucharlo me siento muy poca cosa y me cuesta salir a flote. Lo veo muy contento y coqueto con otra compañera, por ejemplo, y me da rabia y también celos. Me siento muy tonta de en su momento haberlo querido y ayudado y haber terminado siendo un mueble.
Lo sé, yo sabía que era casado y que aquello estaba mal, pero igual me involucré y siempre fui leal. He guardado total discreción de aquello, nunca lo he expresado a nadie, y trato día a día de ser invisible en el trabajo, pero nunca pensé que él se iba a comportar de esta forma conmigo y a negarse a conversar. No sé cómo debo hacer para continuar día a día en el trabajo y poder dejar atrás las emociones negativas que me afectan. A veces no quiero ir a trabajar o no logro concentrarme. Tampoco he logrado encontrar otro trabajo.
Decaigo, me voy al baño del trabajo a llorar, no me dan ganas de nada, rabia. Y tengo miedo, miedo de ser despedida y sufrir acoso laboral, ya que él tiene el sartén por el mango.
Nunca pensé llegar a estar así.
Les agradezco sus comentarios y ayudarme a manejar esta situación.