¿Qué es la asertividad?
Es una habilidad social que nos permite expresar nuestros derechos, opiniones, ideas, necesidades y sentimientos de forma amable, directa, honesta y sincera sin herir los sentimientos ni perjudicando a los demás, y en el momento oportuno.
Las personas asertivas tienen un nivel alto de autoestima y autoconfianza, lo que les permite saber lo que quieren, sentirse seguras de sí mismas y comunicarse con honestidad
Cuando somos asertivos sabemos cómo pedir, cómo negarnos y cómo negociar. Por el contrario, cuando no los somos, podemos actuar desde la ansiedad, la culpa, la rabia o la ira, lo que termina dañando a los demás.
Si bien los expertos afirman que la asertividad es una cualidad que personas emocionalmente sanas practican de forma hasta intuitiva, también es una habilidad que se puede desarrollar trabajando desde el interior.
¿Cuáles son los beneficios de la asertividad?
Ser asertivo conlleva múltiples beneficios, uno de ellos es que nos permite tener mayor sensación de control sobre el entorno y sobre nosotros mismos, pues sabemos que tenemos la capacidad de decir qué es lo que queremos y que es lo que no queremos sin herir ni causar conflictos.
Esta capacidad de poner límites mejora nuestra autoestima y autoconfianza, sobre todo cuando se trata de emprender actividades propias.
La asertividad no busca el conflicto, sino que la comunicación eficiente, esto aumenta las posibilidades de llegar a un entendimiento con otra parte sin que se produzca una situación de desagrado.
Esto último ayuda a que tengamos menos estrés y menos culpa cuando nos neguemos a realizar algo que no podemos o no queremos hacer, lo que permite que la experiencias que tengamos sean más gratificantes, pues no nos estaremos exponiendo a situaciones desagradables.
Otro beneficio de la asertividad es que mejora las relaciones interpersonales, el autoconocimiento y la gestión emocional.
¿Cuáles son las técnicas para ser más asertivo?
Técnicas de reestructuración cognitiva: Este método terapéutico tiene como objetivo que al paciente se le haga más fácil hacer frente a sus problemas o a las dificultades que se le presenten y, a su vez, identificar los pensamientos negativos que impiden una autoafirmación para posteriormente modificarlos.
Técnicas de reducción de ansiedad: Entrega herramientas para que la persona reduzca la ansiedad en forma física mediante la relajación y la respiración.
Técnicas de asertividad para discusiones: Estas pueden ser:
- Técnica del disco rayado: Repetir nuestro argumento una y otra vez en forma pacífica y tranquila.
- Banco de niebla: Darle la razón a la otra persona para no seguir en una discusión que no lo amerita.
- Aplazamiento asertivo: Se pospone la discusión para que ésta se realice en un momento que nos permite tener un mayor control de la situación.
- Relativizar la importancia de lo que se discute: Hacerle ver a la otra persona que quizás la discusión no tiene la importancia que se le está dando y no lleva a ningún lado.
- Técnica de ignorar: A través del lenguaje corporal y verbal se le hace ver a la otra persona que no seguirás la discusión, pero que no lo estás ignorando.
- Técnica de diferenciar un comportamiento de un modo de ser: Se le manifiesta al otro que aunque uno puede haber cometido un error, no es una mala persona.
- Técnica de la pregunta asertiva: Se acepta la crítica del otro como bien intencionada y se hace una pregunta para identificar con claridad qué fue lo que se hizo mal o molestó.
¿Cuáles son las habilidades asertivas?
La autoafirmación: Poder expresar nuestra opinión y defender nuestros derechos. Saber decir que no, respetar y hacernos respetar sin violencia.
Poder expresar sentimientos negativos: Manifestar cuando algo no es de nuestro agrado, gestionas las críticas que hacemos y que recibimos de una forma que nadie salga lastimado.
Poder expresar sentimientos positivos: Reconocer logros ajenos, destacar algo positivo, felicitar, agradecer, entre otros.
Discriminar entre la aserción, la agresión y la pasividad.
¿Qué función tiene la asertividad en la toma de decisiones?
El hecho de que la asertividad esté relacionada con la autoestima y autoconfianza permite que una persona asertiva tome riesgos, considere las consecuencias de la decisión, defina sus objetivos y se replantee la decisión una vez que la haya tomado.
La asertividad también permite que las decisiones sean tomadas en el momento oportuno, es decir, que no nos precipitemos ni tampoco nos quedemos eternamente evaluando qué hacer.
Además nos permite analizar alternativas, asumir retos, creer en nuestras capacidades, cambiar los objetivos si vemos que las cosas no están saliendo como esperábamos y confiar en otros.
¿Cómo resolver conflictos gracias a la comunicación asertiva?
Identificar la manera en que nos comunicamos: ¿Somos agresivos o pasivos? Identificar la forma en que reaccionamos y respondemos nos ayudará a guiar nuestra conducta hacia la asertividad.
Entender a la otra persona: La asertividad tiene un componente de empatía que es importante que apliquemos durante un diálogo o discusión. Siempre hay tener presente que la forma en que otros actúan tiene una razón. Intentemos saber cuál es.
Escuchar y hablar con pausas: Dialogar implica que ambos tienen que hablar, de lo contrario es monólogo. Y responder implica que tenemos que escuchar, o serían dos monólogos. Y nos tomamos el tiempo de entender lo que el otro quiere decir, estaremos más cerca de alcanzar un entendimiento.
Proponer una alternativa que sea beneficiosa para todos: En una discusión no se trata de que haya ganadores y perdedores, el objetivo debe ser buscar un acuerdo que deje a ambos satisfechos. Si escuchamos con atención los argumentos del otro, podemos ver qué puntos tenemos en común.
Responde correctamente: Evita responder de manera agresiva o pasiva. Para esto debes mantener firmes tus argumentos, pero utilizando un lenguaje verbal o corporal asertivo.
¿Quién te puede ayudar a ser más asertivo?
Un psicoterapeuta nos puede ayudar a trabajar la asertividad, ya que él te guiará para que, primero, identifiques si estás siendo pasivo o agresivo. Dependiendo de este comportamiento, el psicólogo podrá entregarte las herramientas para trabajar tus habilidades comunicativas.
Recuerda que la asertividad se puede desarrollar, así que aún estás a tiempo de aprender. De esta forma además podrás mejorar tu autoestima y tu autoconfianza.
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