Te quiero porque quiero

Actualmente estamos desmantelando lo que nos permitió llegar como sociedad en donde estamos, la tribu, los grupos, nuestras redes de apoyo. Solo tenemos grupos en Whatsapp que nos sirven para organizamos bien para la comida o evento del fin de semana, pero hay estudios que dicen que ¼ de las personas responden no tener a quien recurrir cuando necesitan apoyo emocional.

Hablamos con una pantalla y se acabó el cara a cara, la interacción social real pasó de esencial a incidental. Es cosa de salir a un restorán para encontrarnos con parejas conectadas con su celular y no entre ellos. Esto a la vez que creemos profundamente en una relación romántica y validamos más que nunca la comunicación. Así anhelamos la intimidad emocional en un mundo tecnológico.

De ahí nuestras ganas de enfocar la charla en algo útil y concreto para ser y tener esa pareja que soñamos.

Las parejas llegan a la consulta a mostrarnos sus problemas y es nuestro deber buscar sus recursos, mostrárselos y usarlos para esa construcción de la pareja que quieren. No es suficiente bajar el volumen del conflicto y entregar herramientas de negociación: queremos crear un vínculo seguro entre ellos, que logren tener a alguien emocionalmente disponible para el día a día y sus dificultades. Ya fue suficiente escuchar a las mujeres decirse entre ellas: "Es mejor perder al marido que a la nana". No puede ser que nuestra nana sea nuestra única red de apoyo.

Entonces ¿Cómo? Si ya nos enteramos de la manera más brutal que el príncipe azul no existe y que no es "se casaron y vivieron felices para siempre". Los índices de divorcio son nuestra mejor prueba de que nos falta conocimiento de cómo ser una pareja exitosa, entendiendo el éxito como una pareja que se disfruta y permanece en el tiempo. No nos enseñaron que la pareja es algo que se cuida, la idea de esta charla y nuestro trabajar es entregar herramientas para esto. Para que las parejas dejen de invertir energía en esos problemas que no cambian y aprendan a gestionar sus diferencias.

El éxito no llega solo, somos todos aquellos miembros de una pareja los encargados de invertir en que esto ocurra. Nuestro trabajo con parejas y esta charla se basan en estudios científicos de qué es lo que hace distintas a aquellas parejas exitosas, y también en aquellas herramientas útiles para lograr esa conexión emocional que tanto necesitamos. Entonces la mirada que tenemos está puesta en valorar lo que tenemos y, de esta forma, florecer juntos. Derrumbando los mitos y deberías ver que giran en torno al ser pareja, porque si nos paramos ahí, inmediatamente aparece el agravio. "Debería saber lo que me importa", "Si me quisiera no haría eso" y nos transformamos en una víctima de la relación, quedándonos sin nada que hacer y peor aún; resentidos y solos.

Es importante destacar que el coaching de pareja no es solo para parejas que se reconocen en problemas, es también para aquellas que quieren fortalecer su relación. A la vez que se fortalecen ellos mismos y a sus hijos, a la familia que es lo que solemos responder es lo que más nos importa y donde más estrés emocional encontramos.

Necesitamos relaciones amorosas tanto como necesitamos el aire. Cuando estamos conectados y seguros entre nosotros, efectivamente florecemos, no solo de una forma poética o romántica: concretamente nuestra biológica cambia.

Una terapia de pareja puede ayudar a solucionar los problemas recurrentes en la relación y a reactivarla.

La soledad se relaciona con mayor presión arterial y doble riesgo de ataques al corazón, por ejemplo. Estudios en parejas que pelean mucho y luego se les sacaba sangre demostró que la hostilidad y desprecio lleva a un mayor índice de hormonas de estrés, las que son como un veneno para nuestro cuerpo. Se observa también una baja en el sistema inmunológico con un 35% más posibilidades de enfermarnos, y que se nos acorte la vida en 4 años cuando estamos en una mala relación de pareja.

Al contrario, cuando nos sentimos contentos en nuestra relación tenemos mayor flexibilidad y predisposición a experiencias nuevas, se puede ser curioso solo al sentirse seguro. De esta forma el beneficio a nivel profesional puede ser enorme ya que se abre la posibilidad al aprendizaje. Una conexión emocional segura funciona como antídoto contra el miedo, la ansiedad y el estrés, esto por la oxitocina circulante que se genera al estar en una relación de esta característica.

Nuestra invitación hoy es poder, aunque sea una vez al día, decirle a nuestra pareja 3 cosas que valoramos de ellos o les agradecemos, de forma consistente y creativa. Esto es un ejemplo de las herramientas que entregaremos y entenderemos sus efectos relacionales.

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