Salud mental en Chile: siete datos que explican su precariedad

La salud mental de los chilenos no es una prioridad. Con esta frase se podría resumir la sensación generalizada que tienen tanto especialistas del área psicológica como muchos "ciudadanos de a pie" que perciben los sistemas de atención psicológica como deficientes, inaccesibles o incluso nulos.

Pero, ¿a qué se debe esta resistencia entre el mundo de la psicología y los chilenos?, ¿es la población quien ve la psicoterapia como un ámbito desconocido y voluntariamente se mantiene al margen o se trata de un problema de políticas públicas que repercute en la proliferación de trastornos mentales sin tratamiento adecuado? Probablemente ambas opciones son válidas y admisibles, siendo la segunda el origen de la primera.

Con el fin de aclarar un poco más el panorama sobre la salud mental en Chile, a continuación en PsicologosOnline.cl entregamos algunas cifras y datos destacados que pueden ayudar a comprender mejor dónde estamos como nación en esta materia:

• Somos el país de la OCDE en que más ha aumentado el suicidio (después de Corea del Sur). Un total de 1500 chilenos se suicidan anualmente, de los cuales se estima que el 90% sufría alguna enfermedad psiquiátrica.
• El consumo de antidepresivos ha aumentado de manera explosiva. Según un artículo de Revista Médica de Chile, entre 1992 y 2004 los habitantes de nuestro país incrementaron en un 470,2% la ingesta de medicamentos para combatir la depresión. ¿Qué significa esto? Una excesiva medicalización de los pacientes, la equivocada búsqueda de soluciones a corto plazo y probablemente un "sobrediagnóstico" (o, peor todavía, derechamente un diagnóstico erróneo) que puede generar problemas médicos adicionales de salud a nivel mental y físico.
• La salud mental recibe un muy bajo porcentaje del presupuesto de salud. La precarización ocurre sobre todo a causa de este tema: la importancia de la salud mental dentro del presupuesto total de salud es ínfima (representó el 1,2% en 1999; 2,14% en 2004; y 3% en 2013). La cifra ha aumentado, pero de manera insuficiente, de acuerdo a la propia Organización Mundial de la Salud, la cual estima que como país debemos alcanzar al menos una "tajada de la torta" de entre el 6 y el 10% del presupuesto.
• Sólo 3 de las 80 enfermedades del plan AUGE están relacionadas con la salud mental. Si bien en julio de 2013 se celebró la incorporación de 11 nuevas patologías a este plan, con lo cual el Ministerio de Salud alcanzó un total de 80 enfermedades que cubrirían las necesidades de más de 9 millones de chilenos, son sólo tres las dolencias de salud mental que están cubiertas por este plan de salud universal: esquizofrenia, depresión y trastorno bipolar (incorporada hace menos de 2 años).
• (Al parecer) no somos felices. En un ranking sobre bienestar diseñado por la OCDE en 2013, en el marco del informe Índice para una Mejor Vida, Chile es uno de los países "menos felices" de este grupo de naciones industrializadas: ocupa el puesto 32 de un total de 34. Aparentemente la conjugación de factores como la vivienda, el nivel de ingresos, el empleo, la educación, el medio ambiente, la salud, la seguridad y el balance de la vida personal y el trabajo, entre otros, no alcanzan niveles aceptables para los propios chilenos.
• Problemas psicológicos como incapacidad transitoria. Por una parte, investigadores de la Universidad de Concepción determinaron que casi un tercio de los chilenos sufre algún problema psiquiátrico en algún momento de su vida, siendo la depresión, la ansiedad y el abuso de alcohol y drogas los problemas más usuales. Por otra parte, "las licencias por salud mental se convirtieron en 2008 en la primera causa de incapacidad transitoria en los usuarios del sistema público", de acuerdo al Informe Anual sobre Derechos Humanos en Chile 2013. ¿Consecuencias? Pérdida de productividad en el trabajo, mayores costos para el sistema de salud y una infinidad de alertas sobre el estado mental de nuestra ciudadanía.
• La desigualdad económica sí es un tema psicológico. La correlación entre inequidad de ingresos y una mayor prevalencia de enfermedades mentales, así como del abuso de drogas, está respaldada por diversas investigaciones del área científica y psicológica. Y, siendo Chile uno de los países con mayor desigualdad en la distribución de su ingreso, esto cobra especial importante: tal como señala el psicólogo Jimenez en este artículo de la BBC, "a menor ingreso, mayor prevalencia de depresión y síntomas depresivos" y, por tanto, "es posible decir que una medida preventiva por excelencia sería una mejor distribución del ingreso".

Frente a todos estos datos, y muchos más que han surgido en los últimos años, diversos grupos vinculados a la psicología y psiquiatría han manifestado su interés en mejorar estas condiciones en nuestro país e incluso un grupo de académicos propone que se promulgue una ley de salud mental, dado que Chile es uno de los pocos países que no cuenta con legislación al respecto.

Y tú, luego de leer todos estos antecedentes sobre nuestro país, ¿crees que necesitas ayuda psicológica? Comunícate con algunos de los mejores psicólogos en Chile que están presentes en nuestro portal para hacer las consultas que estimes convenientes.

Foto principal. Autor: Rodrigo Basaure. Algunos derechos reservados bajo la licencia Creative Commons. Foto del texto. Autor: BruceW. Algunos derechos reservados bajo la licencia Creative Commons.

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