¿Por qué tu cerebro te hace procrastinar? ¿Cómo combatirlo?

¿Te ha pasado que te sientas a trabajar o hacer algo que tienes pendiente y justo en ese minuto sientes hambre, sed, o te dan ganas de ir al baño, justo suena una notificación de mensajes en Whatsapp y luego te acuerdas que no respondiste un mail?

Así, pasan los minutos y aún no logras concentrarte en el trabajo porque siempre surge algo que te distrae. Puede que en ese minuto nada sea tan importante como tu trabajo, pero no logras concentrarte. ¿Por qué tu cerebro te hace procrastinar? Por un fenómeno llamado efecto de urgencia.

Los expertos dan dos respuestas: Una, nuestro cerebro tiende a dar prioridad a las cosas que le generan satisfacción; y dos, y las personas tienen a resolver primero las tareas pequeñas con fecha límite que las grandes sin un tiempo tan delimitado.

Por esto, aunque la tarea grande sea significativamente más importante que las pequeñas, instintivamente la persona escoge realizar las pequeñas. ¿Se puede luchar contra nuestro cerebro?

"La procrastinación es el ladrón del tiempo" (Chrisoula Andreou)

• Una forma de luchar contra la procrastinación es organizar lo que debemos hacer en un listado de las cosas que debemos hacer y clasificarlas en urgente, no urgente e importante, no importante. Esto te ayudará a ser más consciente de todas las tareas que deben realizar.
• Otra técnica es congelarte. Sí, cuando te sientes a trabajar o estudiar y sientes deseos de ver un video en YouTube o de revisar Facebook entonces congélate, no hagas nada. Es una forma de "acorralar" tu cerebro y acostumbrarlo a que deje de buscar la procrastinación.
• También está la estrategia de minutos de trabajo y minutos de recompensa. ¿En qué consiste? En enfocarte exclusivamente en tu trabajo durante 5 minutos y después descansar otros 5 minutos. Luego los minutos de trabajo tienen que ir aumenta a 10 minutos, pero los de descanso avanzan sólo un poco más. Así puedes llegar a tener 25 minutos de trabajo y 10 de descanso.
• Para otras personas funciona muy bien la técnica de la rutina. Dedicar una cantidad de tiempo a la misma hora del día para realizar un trabajo. Al transformarlas en rutina, terminarás haciéndolas sin esfuerzo, pues inconscientemente tu cerebro se habrá hecho un hábito.
• También debes aprender a gestionar tu energía y no necesariamente tu tiempo. Es decir, trabaja en los momentos es que sientas que estás más activo, despierto, con energía. Por ejemplo, para muchos trabajar después de almorzar resulta muy difícil, pues el almuerzo aumenta los niveles de azúcar en nuestra sangre y eso genera sueño.
• Si el trabajo es grande o no sabes cómo comenzar, divídelo en tareas, así disminuirás la angustia y la preocupación que, sin duda, genera que la labor se vea abrumadora. Al dividir en mini tareas, sabrás cómo empezar y comenzarás a avanzar. Esto te dará la sensación de progreso y eficacia.
• Cambia tus hábitos. Debe analizar lo que haces, identificar qué aumenta la procrastinación y modificar esos hábitos. Por ejemplo, hay personas que escuchan música para estudiar, pero no necesariamente la música ayuda a todos a concentrarse, hay personas que simplemente terminan cantando.

¿Estás listo para romper el círculo de la procrastinación?

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