Consejos para superar el estrés postraumático

Cuando una persona vive una experiencia fuerte como un asalto, una agresión sexual o es víctima de un accidente, es muy probable que desarrolle un Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT), un problema que puede afectar su vida personal, laboral y familiar.

Sí, porque después de un evento traumático es normal que la persona tenga temor, nerviosismo y miedo. El tema es cuando esos síntomas persisten en el tiempo y comienzan a afectar otras áreas de su vida.

Por ejemplo, vivir un terremoto de gran magnitud naturalmente generará un estrés y pánico incluso semanas después del episodio. Pero si ese miedo persiste después de meses, si la persona aún revive ese momento en su cabeza y repite los mismos síntomas, entonces ya hablamos de un TEPT.

Si aún no has hecho el test para saber si padeces TEPT, pincha aquí y lee los resultados en el artículo ¿Qué es el TEPT?

Pero hay soluciones, no se trata de una enfermedad crónica sino de un trastorno que se puede superar, así que atento a los siguientes consejos.

1. Escribe en un cuaderno tu definición de víctima y léela varias veces al día durante una semana.
2. Escribe una página en la que expliques qué significó para ti haber experimentado ese episodio traumático y cómo ha afectado tu vida, desde tu autoestima hasta tu relación con los demás.
3. La tarea tres quizás es la más compleja, pues deben escribir un relato completo, con todos los detalles que recuerdes de aquel episodio traumático. Las palabras, los sabores, los olores, los sonidos, los pensamientos que tuviste, cómo te sentiste…

Si te cuesta completar este relato de una sola vez, entonces has una línea y continúa después u otro día. Pero antes de que vuelvas a escribir, relee todo el texto de nuevo y después continúa agregando.

Estos tres pasos están basados en unas de las técnicas del reprocesamiento de la información, el cual permite superar una secuela traumática a partir de la unión del paso del tiempo y el afrontamiento de los recuerdos.

Sin embargo, es posible que -para completar esta tarea- necesites del apoyo de un psicólogo que te oriente, apoye y anime en esta misión. Además podrás compartir con él tus textos y comentarlos para que él tenga más herramientas que le ayuden a elegir las estrategias de tu terapia.

¿Cuándo pedir ayuda?

Cuando se trata de la salud mental, muchas personas ignoran ciertos síntomas y dejan pasar el tiempo. Sólo consultan cuando ya el problema se ha salido de control o ha deteriorado sus vidas considerablemente.

Después de un episodio traumático, será normal que tengas dudas sobre hasta qué punto es normal lo que sientes. Por eso, te explicamos en qué circunstancias es de suma urgencia que consultes con un psicólogo:

• Cuando no tienes a nadie con quien hablar.
• Cuando no sientes que tus sentimientos y emociones han vuelto a la normalidad después de seis semanas.
• Cuando las personas que te rodean han notado cambios y te están pidiendo que busques ayuda.
• Cuando tu trabajo, estudios, visa socia, familiar o de pareja se están viendo afectados.
• Cuando te resulta difícil realizar las tareas diarias

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